Las Mujeres elegimos a quienes gobiernan

elegimosObjetivo…

Posicionar el voto de las mujeres como un voto con poder para la transformación social, económica y cultural de los territorios, generando conciencia acerca del voto responsable y de la importancia de la participación ciudadana en las elecciones locales desde el reconocimiento de las mujeres como sujetos derechos.

Porqué queremos hacer esta Campaña…

Esta propuesta surge de una serie de hipótesis referidas a las causas que conducen a la poca participación de las mujeres en las dinámicas políticas.  Cuando nos referimos a política no solo aludimos a eventos como las elecciones o la participación en partidos políticos.  Subrayamos en esta expresión cualquier acción que produce incidencia a corto, mediano o largo plazo en las dinámicas colectivas y sociales, incidencia en términos económicos, educativos, familiares, y que se traduce en varios resultados:

♀        Un posicionamiento y visibilización de las mujeres, de sus intereses y necesidades en el tejido social y político sin que se establezca como es habitual la cuestionable separación entre lo público y lo privado.

♀        Un reconocimiento de la voz y palabra de las mujeres como instrumentos de transformación personal social y política.

♀        Una transformación sostenible de las relaciones de poder en todos los ámbitos en los cuales tienen presencia las mujeres, tanto en los llamados privados como públicos.

Si realizamos una observación que por lo demás no exige ser cuidadosa, especializada o especialmente detallada, salta a la vista que la relación de las mujeres con el poder se encuentra desfavorecida por varios aspectos:

♀        En primer lugar, por los efectos de construcciones sociales que llegan a instituirse en calidad de certezas, construcciones derivadas de la identidad de género y a la cual subyace fundamentalmente una idea: las mujeres están excluidas de cualquier posibilidad de ejercicio del poder debido a la equivalencia establecida entre hombre y poder.

♀        En segundo lugar, por la introyección, legitimación y aval automático, tanto en hombres como en mujeres, de una identidad femenina concentrada en lo privado, las relaciones familiares, la maternidad y la crianza, actividades de las cuales se derivan construcciones referidas al ser mujer asociado con el silencio, la obediencia, el cuidado, el tener como interés supremo el beneficio del otro aunque ello se traduzca en renuncias a los propios proyectos, deseos y expectativas.

♀        Otro aspecto que puede nombrarse en este contexto es la desautorización íntima presente en muchas mujeres para ocupar cargos que suponen la toma de decisiones y el ejercicio de poder, desautorización que obstaculiza el ejercicio de los derechos desde la posición de sujeto de derecho.  Esta consideración supone que aunque existen leyes y mecanismos inspirados en la intención de promover la participación social y política de las mujeres, muchas de ellas no ejercen sus derechos asumiendo una posición de autonomía y de reconocimiento de su condición de sujeto portador de intereses, necesidades y condiciones diversas a las características de los varones.  Puede verificarse con facilidad que en no pocas ocasiones algunas mujeres pueden inscribirse en acciones sociales y políticas asumiendo una posición característica del rol maternal y doméstico. Para ilustrar este aspecto baste con recordar cuántas mujeres votan en función de los intereses del marido, novio, amante, padre o amigos.

♀        Un aspecto que no puede perderse de vista cuando se indaga la desautorización íntima presente en muchas mujeres que obstaculiza su decisión de participar e incidir en las dinámicas sociales y políticas son los efectos devastadores derivados de las diversas violencias dirigidas contras las mujeres, violencias no siempre visibles y contundentes como las sexuales y físicas.  Son de especial importancia en este registro los efectos cotidianos y acumulados del desprecio hacia la palabra, ser y cuerpo de mujeres, jóvenes y niñas. Y resulta apenas lógico que una mujer que desde niña ha sido nombrada como “bruta”, “incapaz”, “inútil” no se sienta con la autoridad de tomar decisiones en un campo habitualmente asociado con el saber, la inteligencia y la capacidad de decisión como lo es la política.  Los efectos de las distintas expresiones de la violencia se traducen en una desautorización presente en cada mujer afectada para instituirse como sujeto social y político.  Por este motivo resulta indispensable articular ambos aspectos, es decir, la participación política y la violencia contra las mujeres.  No se trata de ámbitos ajenos el uno al otro porque mirándolo con cuidado, ambos aspectos se entrecruzan e imbrican.

Sin lugar a dudas, se amerita un estudio a profundidad indagar por qué en un país en el cual se han reconocido en términos jurídicos los derechos sociales y políticos de las mujeres, en lugar de incrementarse, disminuye el número de mujeres que se candidatizan y son elegidas para cargos de decisión en las diversas instancias.

Pero la necesidad de llevar un estudio que implica procesos costosos tanto en términos económicos como exigentes en el tiempo, no puede impedir diseñar y llevar a cabo, acciones que apunten a visibilizar el lugar de las mujeres en las dinámicas políticas.  Acciones sostenidas no solo en el propósito señalado, sino además, en el interés de hacer visible el poder inscrito en un acto aparente banal como el voto femenino.  Y decimos banal porque considerarlo de este modo ha resultado una contundente estrategia social para hacer creer a las mujeres que ellas finalmente no inciden de manera fundamental en las dinámicas sociales y colectivas.   Presupuesto que resulta cuestionable con solo revisar someramente, por ejemplo, el censo electoral.   En éste al mayor porcentaje corresponde a las mujeres (51.92% del censo electoral en Colombia, corresponde a mujeres: 15’499.591 mujeres y 14’352.508 hombres. Dato similar en el caso de Antioquia, Bogotá, el Valle y en el exterior)[1]. Algo semejante encontramos con el porcentaje de población votante.  En ese sentido el porcentaje más alto de la población votante corresponde a mujeres.

¿Cómo lo vamos a hacer?

Difusión:

♀        Serie de entregas informativas en www.vamosmujer.org.co

♀        Clips animados en el canal de Vamos Mujer en Youtube: Yo decido 1, Yo decido 2, Yo decido 3, Yo decido 4.

♀        Transmisión en directo de los foros públicos de lobby y cabildeo a través del canal livestream.

Lobby y Cabildeo:

Atendiendo a nuestra experiencia de construcción con las mujeres y de incidencia en espacios de concertación política le seguimos apostando a privilegiar la palabra de las mujeres como aquella posibilidad de construir nuevos significados a las cosas que están dadas por la sociedad.

Por eso, en el marco de esta campaña desataríamos una reflexión con las mujeres y con instancias de decisión y otros espacios de articulación que son importantes para la incidencia en los territorios para que, especialmente las mujeres, tomen conciencia de la importancia de su participación y que sus planes de incidencia tengan un lugar en la transformación de sus condiciones de vida.

La discusión sobre sus propuestas de desarrollo, el análisis de contexto, y los ejercicios de discernimiento de las propuestas de las y los candidatos de las diferentes opciones políticas, son indispensables para que las mujeres y sus organizaciones valoren sus aportes al desarrollo y decidan con autonomía. En este sentido se plantea la realización de reuniones y foros, que fortalezcan la participación de las mujeres en procesos políticos de negociación, lobby y cabildeo de agendas ciudadanas para el desarrollo y en los que también se ponga en discusión publica la importancia de las mujeres como actoras políticas.

Acciones específicas

♀        Preparación de acciones de Lobby y Cabildeo

♀        Lobby con diferentes instancias y escenarios de decisión

♀        Foros de cabildeo con candidatos y candidatas.

Formación y Seguimiento:

Vamos Mujer en su interacción con las organizaciones de mujeres ha evidenciado la importancia de la cualificación de la posición política de las mujeres para el real ejercicio de su ciudadanía plena, generar espacios de información – formación es fundamental para la construcción de una postura crítica frente al contexto y para el fortalecimiento de los argumentos de las mujeres en la negociación de las decisiones que se toman acerca del desarrollo de sus territorios.

La formación hace que las mujeres se acerquen y conozcan las dinámicas de poder existentes en sus territorios y que ganen herramientas para la concertación coherentes con sus intereses colectivos.

Acciones específicas:

♀        Construcción de Agendas Ciudadanas Regionales de Mujeres.

♀        Elaboración de herramientas de pedagógica electoral. Entrega 1, Entrega 2, Entrega 3, Entrega 4, Entrega 5, Entrega 6.

♀        Foros Las Mujeres Elegimos a quienes gobiernan. Foro Medellín 2011



[1] http://www.registraduria.gov.co