CARTA ABIERTA AL GOBIERNO NACIONAL, A LAS FARC-EP Y AL ELN

“La paz es hija de la convivencia, de la educación, del diálogo […] La paz no es solamente la ausencia de la guerra; mientras haya pobreza, racismo, discriminación y exclusión difícilmente podremos alcanzar un mundo de paz”
Rigoberta Menchú

Medellín, 3 de noviembre de 2016

Como mujeres colombianas y en razón de la incansable y sostenida apuesta que cotidianamente venimos desarrollando en nuestros territorios por una paz con justicia social y equidad de género, queremos expresar nuestras propuestas en este momento histórico donde los distintos sectores de la sociedad civil se pronuncian para que se logren acuerdos justos de paz.

Celebramos que la ciudadanía se encuentre de pie y movilizada con la clara certeza que lo que está sucediendo en este tiempo es histórico para nuestro país. Pensamos que este momento compete a cada una de las personas que habitamos este suelo y que no queremos que sea solo un puñado de hombres los que definan el futuro de todo un pueblo.

Por eso queremos a través de esta carta abierta expresar nuestras propuestas, muchas de ellas conversadas y enunciadas en los espacios de participación del movimiento social de mujeres del que hacemos parte.

Entre las propuestas que construimos están:

  1. Lo vivido y logrado como movimiento social de mujeres en los diálogos entre el Gobierno Nacional y las FARC-EP debe ser punto de partida para las conversaciones entre el Gobierno Nacional y el ELN, teniendo la convicción que debemos ser pactantes desde el inicio de este proceso.
  2. Reconociendo las diversidades de mujeres que habitamos los territorios de Colombia, proponemos que nuestra participación ciudadana sea sostenida en todo el proceso de dialogo entre El gobierno Nacional y el ELN y que refleje los intereses y propuestas de dichas diversidades.
  3. Invitamos al Gobierno nacional y a las FARC a que no claudiquen en lo obtenido con el enfoque de género. Consideramos imprescindible pensar un país incluyente de las diversidades, con capacidad de tolerar las diferencias y construir desde ellas.
  4. Queremos que en los acuerdos se contemple un territorio con desarrollo sin modelos extractivistas.
  5. Consideramos imprescindible que las y los jóvenes tengan oportunidades de educación superior en sus territorios, especialmente en las zonas rurales, ya que es importante que el acceso a la educación sea más equitativo y permita que los jóvenes sigan habitando el campo sin tener que irse a las grandes ciudades en busca de proyectos de vida.
  6. Necesitamos construir una memoria histórica de las mujeres en base a la verdad y el reconocimiento por parte de todos los actores armados de los hechos que afectaron nuestro cuerpo y nuestras vidas.
  7. Las mujeres queremos territorios desminados y tierras tituladas para así poder desarrollar nuestras iniciativas económicas con condiciones dignas.

Mujeres y hombres que se encuentran sentados en las mesas de dialogo, hoy tienen un compromiso enorme: lograr a través de los acuerdos que Colombia cierre el gran capítulo de la guerra y que comience un tiempo de paz con justicia social y equidad de género.

Los alentamos a cimentar esas conversaciones de manera respetuosa y responsable, sin dejarse influenciar por intereses mezquinos, individualistas y de protagonismos que solo llevarán al país a una mayor polarización de la que vivimos.

Cordialmente

Corporación Vamos Mujer
Asociación de Mujeres Cañón del Río Porce
Asociación de Mujeres Organizadas de Yolombó- AMOY
Aracelly Correa Cifuentes- AMC
Inés Lucía Velásquez- AZAMA
Odilia María Medina Vásquez- Asociación Marta Lina Gómez
Julie Galiano García- AMMUAN
Asociación de Mujeres del Suroeste ASUBMUS