Boletín de prensa No. 1 Presentación del XVII Informe sobre la situación de Derechos Humanos de las mujeres en territorios de Medellín y Antioquia, con énfasis en violencias políticas

BOLETÍN DE PRENSA

 

Medellín, 10 de octubre de 2019.

 

La Corporación Vamos Mujer y la Corporación para la Vida Mujeres que Crean damos continuidad a un ejercicio persistente que da a conocer desde el año 2001, un informe anual sobre la situación de violación de los derechos humanos de las mujeres en Antioquia. Con la responsabilidad ética y política de denunciar y aportar a la conciencia sobre la grave situación de vulnerabilidad que vivimos las mujeres frente a las violencias machistas.

En nuestro informe XVII presentamos en el primer capítulo nuevamente las cifras y el seguimiento comparativo entre el año 2017 y 2018 identificando los patrones, retrocesos o avances con relación a las violencias que sufren las mujeres en las zonas focalizadas por el informe; Antioquia, Medellín y municipios del Área Metropolitana, conservando la línea de análisis de las tres categorías de violencias ejercidas contra las mujeres abordadas en ediciones anteriores, a saber; los feminicidios, las violencias sexuales y la violencia intrafamiliar con énfasis en violencia de pareja.

En el segundo capítulo abordamos las violencias, obstáculos y barreras que se extienden contra las mujeres dentro de las estructuras partidistas, identificando las diferentes manifestaciones de violencia que se expresan en las colectividades políticas y cómo las agresiones que se presentan en estos escenarios repercuten negativamente en la participación política de las mujeres.

 

         Aunque somos conscientes de varios cambios posibilitados por la persistencia de la colectividad de las mujeres en movimiento feminista, hacia la incidencia en las dinámicas

 

de lo público, las mujeres continuamos jugando un papel secundario e instrumental con pocas opciones de cambios sustantivos, lo que ha impedido nuestro aporte como sujetas colectivas legítimas en la definición de los asuntos públicos.

Este informe hace entrega de análisis que buscan avanzar hacia transformaciones que permitan condiciones de desarrollo con justicia y equidad para las mujeres al interior del sistema político, contando con la participación política de las mujeres que representan los derechos de las mujeres en las instancias de decisión, es un requisito ahora inaplazable, que permitiría avanzar en la construcción de una democracia plena y en la transformación de las relaciones patriarcales de poder y dar lugar al reconocimiento y valoración del trabajo reproductivo, productivo y de gestión comunitaria, como aporte de las mujeres al buen vivir de la sociedad.

 

 ¿Por qué hacemos este informe anual? 

 

● Porque en el primer trimestre de este año se han registrado 220 casos de homicidio de mujeres en el país, siendo las personas más cercanas (esposo, novio, parea, expareja) las responsables de los casos violentos[1]. 

 

● Porque en el país existe un 90% de impunidad cuando denunciamos las violencias contra las mujeres[2]. 

● Porque la justicia es patriarcal y pone en duda nuestra palabra. 

● Porque no nos sentimos seguras en el espacio público, ni en la noche. 

● Porque somos víctimas de violencias institucionales, a través del poder judicial, de los servidores públicos y de las fuerzas armadas “seguridad”. 

 ● Porque la mayoría de los medios de comunicación realizan un tratamiento amarillista y morboso de los casos de violencia contra las mujeres.

● Porque el Estado no asume la responsabilidad que le corresponde en prevenir y castigar a los agresores. Estas circunstancias hacen que el riesgo de sufrir violencias. machistas sea mayor y que, en muchos casos, dependamos de nuestros agresores. 

 

¿Por qué elegimos visibilizar las violencias políticas?  

 

– Porque este tipo de violencia impacta de manera específica a las mujeres. 

– Porque, aunque las mujeres somos más de la mitad de la población del país, del departamento y de los municipios de Medellín, Caldas y Barbosa, en los cargos de representación política no sobrepasamos el 25%.  

– Porque en los escenarios partidistas, las mujeres son víctimas de múltiples agresiones como las psicológicas, físicas, sexuales, económicas y simbólicas.  

– Porque en razón de las violencias machistas, que persisten al interior de los partidos políticos, muchas mujeres no tienen incentivos o se ven desmotivadas para continuar participando en la política.   

–  Porque las mujeres enfrentan no solo obstáculos estructurales, como los existentes en el sistema electoral y de partidos, sino también obstáculos de permanencia en el que son discriminadas y violentadas por ser mujeres en los partidos políticos.  

– Porque los partidos siguen incumpliendo con lo dispuesto en la Ley 1475, en lo referente a referente a la destinación de los rubros estatales para la formación política de las mujeres y la financiación de campañas de mujeres, jóvenes y grupos étnicos. 

– Porque es fundamental que los partidos políticos cumplan con lo establecido en la legislación colombiana, con respecto a los derechos políticos de las mujeres, y que ello que se acompañe con acciones de reconocimiento y apoyo a las mujeres que incursionan en la política. 

– Porque la sola presencia de las mujeres en el escenario político no basta, es necesario crear condiciones que garanticen que una vez las mujeres estén en las instituciones democráticas, puedan representar los discursos feministas en los partidos y escenarios de toma de decisiones.  

– Porque la incursión de las mujeres en el mundo de lo público, representa una ventana de oportunidad para incluir nuevas perspectivas y construir instituciones y dinámicas políticas democráticas y plurales, desde la experiencia del empoderamiento femenino. 

 – Porque hay que transitar hacia la feminización de la política, es decir, comprender cómo a partir de las experiencias y subjetividades construidas por las mujeres emergen nuevas prácticas de hacer política y de ejercer la ciudadanía, transformando los contenidos tradicionales de la democracia patriarcal hacia sistemas que reconozcan la pluralidad de las sujetas y los sujetos.  

 

¿Para qué hacemos este informe? 

 

● Para que se considere la violencia machista como una cuestión de toda la sociedad, y por lo tanto toda la sociedad se debe comprometer con erradicarla.

● Para promover una educación no sexista en las escuelas, universidades y demás espacios educativos, desde las diversidades sexuales sin estereotipos y las identidades y/o expresiones de género. 

● Para recordar que existe una legislación vigente que protege a las mujeres y niñas y que la usamos para reclamar justicia. 

● Para que el rechazo a las violencias contras las mujeres se haga a través de cambios culturales, en las ideas, actitudes, relaciones cotidianas. 

● Para que como sociedad no continuemos naturalizando las violencias contra las mujeres. 

● Para conquistar el espacio público y que podamos transitar de día o de noche sin temor a ser acosadas, violentadas y culpabilizadas. 

● Para que la seguridad en los espacios públicos sea pensada desde una perspectiva de género y no mediante el incremento de la presencia de la policía y el control de nuestros cuerpos.

● Para que todas las mujeres vivamos libres de discriminaciones y podamos ejercer nuestros derechos como ciudadanas políticas. 

● Para que quienes hacen las leyes y políticas públicas, reciban de manera continuada y obligatoria, formación con perspectiva de género. 

● Para que la formación con perspectiva de género se incluya en los temas de las pruebas de acceso dirigidas a quienes deseen ser servidores-as públicos-as. 

● Para que los medios de comunicación tengan perspectiva de género y traten las violencias machistas con rigor, con información exacta sin perder de vista la dignidad de las víctimas. Presentándolas como sujetos, no victimizando ni empatizando con el agresor. 

● Para que los medios de comunicación no difundan estereotipos y prejuicios sexistas. 

● Para construir sociedades solidarias y justas que garanticen los derechos de las mujeres como derechos humanos.

● Para garantizar la autonomía de todas las mujeres en toda su diversidad que nos permita, en el continum de violencias, superar la situación de dependencia en un entorno proclive a las violencias. 

 

 

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